Pitón Reticular, Anaconda Verde y Boa Constrictor
Piton Reticular
La pitón reticulada (Malayopython reticulatus) es una especie de serpiente perteneciente a la familia Pythonidae, propia del Sureste asiático y la Wallacea. Hay estudios genéticos que afirman que el género Python es parafilético y que esta especie debe pertenecer a un género, Malayopython.3
Descripción
Pitón reticulada
Es la serpiente más pesada que se conoce, pudiendo sobrepasar en algunos ejemplares los 8 m y 250 kg de peso, pero en cautividad raramente superan los 6.5 metros.
Existe un debate aún en la actualidad sobre cuál es la serpiente más grande. Algunos están a favor de la pitón y otros de la anaconda. La anaconda es la serpiente más larga; sin embargo, los ejemplares más pesados encontrados han sido de pitón reticulada.
El Libro Guiness de los Récords tiene erróneamente como la mayor serpiente descubierta una pitón reticulada capturada en la isla de Célebes, Indonesia, en 1912. Superaba los 8 metros de largo al momento de ser encontrada. En el año 2004, en un parque al sur de la isla de Sumatra, también en Indonesia, se exhibió una serpiente pitón que se creía que era de mayores dimensiones (los captores clamaron 10.32 m de largo, 185 cm de perímetro y 448 kg de peso), pero posteriormente se informó que en realidad no alcanzaba a superar el récord de 1912. En septiembre de 2017 se capturó una gran pitón reticulada en la isla de Penang, Malasia, que según el Departamento de Defensa civil de ese país midió 8.56 metros de largo, los 112 centímetros de grosor y pesó 254 kg.4 La pitón reticulada más grande existente actualmente en cautiverio es un ejemplar conocido como "Medusa", el cual pertenece a una casa de los horrores conocida como The Edge of Hell Haunted House ubicada en Kansas city. Este ejemplar presenta una longitud de 7,67 metros y un peso de 227,8 kg.54
La pitón reticulada posee cabeza alargada, hocico ancho y relativamente plano, además de una impresionante boca dotada de casi un centenar de dientes. Sus ojos destacan por ser de un color amarillo anaranjado con una pupila negra brillante. Posee un cuerpo robusto, fuerte y elástico con una vistosa coloración de tonos amarillos, pardos y ocres en dorso y costados, que se aclaran hasta la cara ventral, prácticamente blanca. Unas estrías negras delimitan manchas reticulares hexagonales de color pardo oscuro que se ensanchan en los laterales.
Distribución
Originaria de Asia sudoriental, Indonesia y Filipinas, habita en los bosques lluviosos en zonas cercanas al agua, ya que puede nadar largas distancias. De costumbres crespusculares, se la suele encontrar en los lugares más insólitos, incluso dentro de viviendas o en bodegas de barcos.
Alimentación
Cabeza de pitón reticulada.
La pitón reticulada es carnívora; captura presas durante el crepúsculo, a las que engulle enteras. Dependiendo del tamaño de la serpiente, consumirá animales de mayor o menor volumen, entre los cuales se encuentran grandes roedores, peces y otros reptiles. Los especímenes más grandes cazan varanos, ciervos, jabalíes, pavos, e incluso leopardos. Junto con la anaconda verde, la pitón reticulada es la serpiente que puede capturar presas más grandes. Por su parte, los únicos depredadores que la cazan son tigres, leopardos y cocodrilos de suficiente tamaño en las zonas en que coinciden.
La pitón que es muy ágil, rápida, y puede trepar a los árboles para cazar presas, como monos. Es de hábitos terrestres y acuáticos para soportar sus propias dimensiones. Al ser considerablemente más robusta que la anaconda, la pitón puede llegar a considerar a los humanos como presa, como así lo demuestran varios ataques, y llegar a tener la fuerza y amplitud mandibular necesaria para matar y engullir a un hombre adulto. En marzo de 2017 se reportó que una pitón reticulada de 7 metros devoró a un hombre de 25 años en la isla de Célebes, Indonesia, cuyo cadáver fue recuperado por los vecinos de esa localidad luego de la captura y muerte de la pitón, proceso que fue registrado en vídeo.67
Reproducción
Aproximadamente dos meses después del apareamiento, la hembra deposita una gran cantidad de huevos en un nido herboso, enroscándose posteriormente a su alrededor para mantener una temperatura superior a la del ambiente circundante. Después de 70 u 80 días eclosionan los huevos y salen al exterior unas crías de aproximadamente 60-70 cm, aumentando su longitud otro tanto durante los primeros cuatro-cinco años.
Anaconda Verde
La anaconda verde o común (Eunectes murinus) es una especie de serpiente constrictora de la familia de las boas (Boidae). Es endémica de los ríos del trópico de Sudamérica. De todas las serpientes esta es la de mayor longitud; rivaliza con la pitón reticulada (Malayopython reticulatus) por el título de la serpiente más grande del mundo, que suele ser más voluminosa, pero menos larga. Se conocen casos de humanos adultos atacados, aunque ninguna serpiente (Malayopython reticulatus como excepción) tiende a atacar a un ser humano, salvo por defensa propia (cuando un humano la está atacando o asustando), ya que estos no forman parte de su cadena trófica.
Distribución
Habita en las cuencas de los ríos Orinoco, Putumayo, Napo, Amazonas, Paraguay y Alto Paraná. Cuenta con poblaciones en Guyana, Trinidad, Venezuela, Colombia, Brasil, Ecuador, Perú, Bolivia y hay una población introducida en los Everglades.
Descripción
Eunectes murinus.
La anaconda es de color verde oscuro, con marcas ovales de color negro y ocre en los flancos. El vientre es más claro, y en la parte final de la cola muestra diseños en amarillo y negro que son únicos para cada ejemplar. El hocico está cubierto por seis escamas engrosadas, tres a cada lado, que constituyen el rasgo más distintivo que separa las especies del género Eunectes de las estrechamente relacionadas serpientes del género Boa.
La cabeza es estrecha, y no presenta un cuello muy marcado. Las narinas y los ojos están en una posición elevada, facilitando así la respiración y la percepción durante los largos períodos que la anaconda pasa sumergida cuando caza. Los receptores olfativos se encuentran en la lengua, como en todas las serpientes. Además posee fosetas loreales y pupilas dilatables, que le permiten cazar en la oscuridad. El cuerpo es ligero pero muy musculoso, adaptado a la forma de presa de la serpiente, que mata a sus presas por constricción.
El único sector de todo el cuerpo no cubierto por escamas se encuentra en la región caudal, en la zona de la cloaca, la cual presenta espolones en sus inmediaciones, que son restos atrofiados que otrora eran extremidades locomotoras.
Rara vez supera los 10 años, aunque se han documentado casos de hasta 50 años.[cita requerida]
Tamaño
E. murinus, Acuario de New England
Aún se debate cuál de las serpientes conocidas es la más grande. Un mito popular asegura que se trata de la serpiente más grande (y que pueden alcanzar tamaños descomunales no comprobados de 15-40 metros y 160-400 kilos), sin embargo, ese título pertenece a su pariente asiática, la pitón reticulada. Aun así, la anaconda es una de las mayores serpientes conocidas al ser por mucho la más larga y, cuanto menos, la tercera más grande, después de la pitón reticulada y la pitón de seba.
La anaconda verde es el caso más marcado de dimorfismo sexual entre las serpientes, ya que las hembras son significativamente mayores que los machos, alcanzando estas un promedio de 5 a 10 metros de largo y un peso de 35 a 85 kg, mientras que los machos alcanzan una longitud de 4 a 5 metros de largo y un peso máximo de 25-35 kg.
En las cercanías de San Félix, en el estado Bolívar, Venezuela, se midió una hembra de 10 metros de largo y 97 kilos de peso; es la anaconda más larga registrada en el país. Sin embargo, los locales la mataron y la colocaron sobre un Chevrolet Spark, lo cual causó furor en las redes sociales.2
Una anaconda hallada en Iquitos, en la selva de Perú, el 4 de septiembre de 2014, llegó a los 12.37 metros de largo y pesaba 106 kilogramos. Se considera el reptil más largo del mundo y la más larga y pesada de la especie, aunque algunos dudan la veracidad de las imágenes asegurando que indican un cálculo de tamaño no superior a los 7 metros y 65 kg de peso aproximado. Lamentablemente, fue matada a palazos en la cabeza por los seis jóvenes pescadores que la hallaron.3 4
Hábitat y comportamiento
Representación de una anaconda comiéndose una capibara.
La anaconda se siente a gusto tanto en los árboles como en el agua; prefiere los estanques de aguas quietas a las corrientes rápidas. Pasa la mayor parte del tiempo recostada en los árboles pero para cazar suele bajar al agua y se sumerge, acechando a su presa; la posición superior de las narinas le permite sumergir casi todo el cuerpo a modo de cripsis, y su poderosa musculatura la hace una rápida nadadora y buena trepadora.
Su mayor rival es el jaguar (Panthera onca). En los llanos venezolanos, su rival es el cocodrilo del Orinoco (Crocodylus intermedius), que compite con ella al alimentarse de capibaras (Hydrochoerus hydrochaeris).[cita requerida]
Caza y dieta
Suelen estar en las profundidades de los ríos la mayor parte del tiempo.
Caza por lo general animales que se acercan a beber, sujetándolos con sus mandíbulas y aferrándose a ellos para enroscarse alrededor de su cuerpo y asfixiarlos. El ataque es extremadamente rápido; en algo más de 3 segundos ya han sometido a su presa. Si encuentra la oportunidad de cazar en tierra, normalmente se descuelga desde una rama para sorprender a su presa. Se enroscan a su presa formando anillos con su cuerpo, pero, por lo general, no es la fuerza de la constricción lo que mata a la presa, sino que le impide respirar, presionando el tórax para imposibilitar la inhalación, y lo logran por la inmensa fuerza de su cuerpo.
La anaconda no tritura sus presas; su mandíbula se desencaja, permitiéndole tragar la presa entera y utiliza su fila de dientes interior (tienen cuatro filas de dientes, una ordinaria y otra en el paladar) para ir avanzando sobre su alimento e irlo introduciendo en su garganta. La digestión de una presa grande puede demorar varias semanas, durante las cuales la serpiente se encuentra casi inactiva y dormida en una rama o junto al agua.
La anaconda pasa la mayor parte del tiempo en los árboles, aunque también baja al agua para capturar presas fáciles. Es capaz de comer animales de gran tamaño; el carpincho es una de sus presas más comunes, así como ejemplares jóvenes de tapires, pecaríes, ciervos, coatíes, grandes roedores y animales acuáticos como peces. En los árboles se alimenta de monos, aves y en ocasiones caza murciélagos: donde espera en la entrada de sus cuevas y los atrapa en pleno vuelo. También se alimenta de anfibios, reptiles y de sus huevos.[cita requerida]
Se han visto anacondas caníbales, la mayoría hembras devorando machos pequeños,5 posiblemente para asegurar la supervivencia durante la temporada seca, cuando escasean las presas.
En su fase adulta, las anacondas solo pueden ser depredadas por el jaguar, aunque también se sabe de casos de anacondas adultas que han matado a estos.[cita requerida]
Reproducción
El apareamiento de la anaconda se produce entre los meses de abril y mayo; las hembras atraen a los machos mediante una señal olfativa, y estos se congregan en torno a ellas a lo largo de varias semanas. En la última fase del cortejo, hasta una docena de machos se enrosca en torno a la hembra, luchando por acceder a la cloaca de esta, formando una bola característica; pueden permanecer enroscados de este modo hasta 15 días, muchas veces en aguas poco profundas, hasta que la hembra -más grande y más fuerte- escoge al vencedor.[cita requerida]
Durante la cópula propiamente dicha, los espolones del macho estimulan la región caudal de la hembra; ambas cloacas entran en contacto, y las colas se enroscan mientras se produce la inseminación.
Conservación
La anaconda no tiene particular valor comercial, aunque su piel se usa ocasionalmente en marroquinería[cita requerida]. La principal amenaza para su conservación es la destrucción de su hábitat, así como la caza por quienes la consideran un riesgo para el ganado doméstico y los niños, sin tener en cuenta el papel que juega en el control de las plagas de roedores.
Boa Constrictor
Descripción
Es la serpiente más larga y robusta de México, mide hasta 5 m de longitud hocico-cloaca y se alimenta de roedores y ciervos. Su cabeza es ligeramente triangular en aspecto dorsal y distintiva del angosto cuello. Sus ojos son pequeños con pupilas elípticas. Su dorso bronceado o gris posee manchas cafés usualmente con manchas claras al interior. El dorso de la cabeza es color bronce o gris con una angosta línea obscura que se origina sobre el hocico y se extiende sobre el cuerpo. Una línea obscura originada en la parte lateral de la cabeza a escala de la nariz, pasa posteriormente a través de la mitad baja del ojo, hacia el ángulo de la mandíbula.
Mide entre 0,5 y 4 m, dependiendo de la subespecie y el sexo del animal, siendo las hembras normalmente mayores que los machos. El mayor ejemplar en cautividad es una hembra de 5,5 m de Surinam que se encuentra en el Zoo de San Diego.
Presenta una atractiva coloración que consiste en superficies dorsales de tonos rojizos que quedan dentro de un fondo que puede ser blanco, rosado, marrón o dorado, dependiendo de la subespecie o los cruzamientos llevados a cabo en cautividad. Durante los días próximos a la muda adquieren una piel de color grisáceo poco vistosa y sus ojos se vuelven de color blanco cremoso.
En la naturaleza es raro que vivan más de veinte años, aunque en cautividad pueden alcanzar los treinta con relativa facilidad. En el Jardín Zoológico de Filadelfia se registró el caso de una Boa constrictor que llegó a vivir 40 años, 3 meses y 14 días.
Comportamiento
Boa constrictora alimentándose.
Es un animal solitario y nocturno. Pasa el día escondida entre las ramas de los árboles o en algún tronco hueco y sale a cazar al caer la noche. Suele trepar a los árboles y tender desde allí emboscadas a sus presas. También baja al suelo con frecuencia en busca de agua y es buena nadadora.
Distribución geográfica
Su área de distribución comprende el continente americano, desde México hasta el centro de la Argentina. En México, esta boa habita a lo largo de las vertientes del Pacífico y del Golfo, en los estados del sur - sureste y en el centro del país.
Vive en hábitats con poca cantidad de agua, como desiertos y sabanas, a la vez que se la puede encontrar en bosques húmedos y terrenos de cultivo. Es un reptil tanto terrestre como arbóreo. Se encuentra en gran cantidad de ambientes entre los 0 y 1,500 msnm. El clima que coincide con el área de distribución de la especie varía substancialmente.
Comportamiento
Boa constrictora alimentándose.
Es un animal solitario y nocturno. Pasa el día escondida entre las ramas de los árboles o en algún tronco hueco y sale a cazar al caer la noche. Suele trepar a los árboles y tender desde allí emboscadas a sus presas. También baja al suelo con frecuencia en busca de agua y es buena nadadora.
Debido a su mala visión, depende de sus escamas termosensibles (fosetas labiales) para detectar a sus presas. Entre ellas se incluyen lagartos, pájaros de tamaño moderado, zarigüeyas, murciélagos, ratas y ardillas. Siente especial predilección por los murciélagos, a los que captura desde los árboles en pleno vuelo. Mata a sus presas mediante constricción hasta estrangularlas.
Reproducción
Llegada la época de reproducción, la hembra comienza a segregar feromonas a través de su cloaca para atraer a los machos. La hembra adquiere una posición rígida característica mientras el macho se mueve lentamente a su alrededor, siempre atento a sus movimientos. Cuando la hembra se muestra receptiva, el macho comienza a pasar por encima de ella y a constreñirla suavemente. La hembra no ovulará hasta que no haya dado comienzo este cortejo.
Tras un largo periodo de cortejo, el macho introduce uno de sus dos hemipenes en la cloaca de la hembra y deposita su esperma. Tras la cópula la hembra intensifica su nivel de melanina, tomando un color más oscuro para absorber más calor. Durante la gestación la hembra cambiará de muda y tras cuatro meses dará a luz entre 20 y 60 crías vivas de entre 30 y 40 cm. Los recién nacidos normalmente no empezarán a comer hasta que hayan tenido su primera muda.